Jorge Lanata no es ningún tonto, lo sabemos todos, muchos de los negocios ligados a su forma de hacer periodismo le fueron bien otros, según ha comentado, le fueron mal. Lo cierto es que es un hombre de innegable visión de la oportunidad.
Lo que también es innegable es que luego de haber presentado a Crítica con bombos y platillos como un diario opositor, investigación periodística rigurosa y comprometida con la realidad. Solo hemos observado que luego de 10 días de haber salido a la venta lo único que se nota es que ni es “Critico”, ni es opositor y mucho menos hace un periodismo comprometido y de investigación.
Por lo que podríamos decir que se quedó a mitad de camino entre la expectativa inicial y la desilusión.
Uno de los slogans que aparecen en el sitio web, http://www.criticadigital.com/ es “Tenemos mucha información que nadie publica”. Lo cierto es que si bien un diario no puede soslayar los temas del día, que terminan siendo comunes en todos los matutinos, quizás se puede percibir un déficit de información original.
Quizás se había generado la expectativa que llegaran más “bombas”, o noticias explosivas. Más allá de esa “escasez” de munición gruesa, alguna pegó en el blanco, como la nota sobre el proyecto del ministerio de Julio De Vido de financiar obras de la polémica Aysa con fondos del Anses, aunque la nota fue desperdiciada al perderla en las páginas interiores. Lo cierto es que a medida que pasan los días y los anunciantes no se suman aparece el sesgo complaciente y conciliador con el poder de turno.
¿Página 12 y Crítica son lo mismo?
Aparte de tener el mismo padre, existen elementos que emparentan a Crítica con el antiguo Página/12. Existen varios ex Página trabajando en el staff del nuevo diario, entre ellos Susana Viau y Miguel Bonasso. Esto se traduce en la reproducción de algunas temáticas, como el seguimiento a las causas de derechos humanos. Igualmente, la vuelta de Bonasso a su rol de periodista es al menos polémica, ya que actualmente es diputado nacional, y es aliado del kirchnerismo. ¿Se puede ser juez y parte al mismo tiempo? ¿Qué hace Bonasso desde las páginas de Crítica política o periodismo?
En cuanto a la línea editorial. ¿Qué es Crítica? ¿Un diario oficialista u opositor? Hasta ahora, en estos pocos números han intentado mantener un delicado equilibrio. Han tocado al gobierno en algunas notas interiores que marcan distancia, pero salvo pocas ocasiones han llevado a la tapa temas que pudieran incomodar a los Kirchner.
Una de los enojos mas escuchados en el paro agropecuario es el de ocupar ningún espacio importante de los diarios nacionales y esto contempla también a Critica ya que de Pagina, de Clarín y de La Nación, salvo estos últimos en el suplemento rural del sábado, poco se puede esperar.
Si era poco lo que uno podía esperar de Critica, ahora se ve reducido a la nada cuando leímos el día de hoy (18 de marzo), una nota firmada por el ignoto periodista Maximiliano Montenegro titulada “ Campo travieso” y en la cual decía:
“María del Carmen vive en un departamento de 58 metros cuadrados, de 40 años de antigüedad, sobre la calle Moldes. En la última boleta bimestral de ABL pagó 138 pesos: 150% más de lo que abonaba antes de que Macri aplicara el revalúo inmobiliario en la Ciudad. Luciano Miguens, titular de la Sociedad Rural, posee 2.219 hectáreas de campo en Salto, en la franja más rica de la provincia, con una valuación de mercado superior a los 40 millones de pesos. Paga apenas 78 pesos anuales (sí, al año) por hectárea en concepto del impuesto inmobiliario rural. Carlos Blaquier, dueño del ingenio más grande del país, y Luis Otero Monsegur, ex dueño del Banco Francés, tributan un poquito menos: alrededor de 50 pesos anuales por hectárea. Manuel Anchorena, con campos en Chascomús, abona todavía menos: sólo 8 pesos al año. La valuación fiscal de esas tierras jamás se actualizó, mientras la valuación de mercado de los campos alcanzó niveles récord en dólares. En 2005, el gobierno de la provincia de Buenos Aires gastó millones en un relevamiento catastral para readecuar los valores fiscales, sobre los cuales Rentas cobra el impuesto inmobiliario. Pero el lobby rural se hizo sentir en la legislatura bonaerense. Y el revalúo en la provincia sólo se instrumentó en los centros urbanos, donde el aumento del impuesto inmobiliario fue incluso mayor al ABL porteño”.
No vale la pena extenderse más en la nota si la quiere leer entera aquí esta:
http://criticadigital.com/index.php?secc=nota&nid=861&pagina=5&order_by=Comentario&sentido=DESC
Lo que si quiero decir es que esta nota es absolutamente tendenciosa y falsa.
Señor Montenegro: a ver....primero que nada no mezcle sandia con uvas, que relación estableció usted (al igual que este señor Montoya) para encontrar una comparación entre lo que paga de ABL una señora por el metro cuadrado de su departamento en la ciudad de Buenos Aires y un productor por la hectárea de su campo????
Realmente me sorprendió de la cantidad de barbaridades que son capaces de hacer con tal de justificarse!!
También es un error periodístico, la valuación fiscal para el impuesto inmobiliario fue aumentada en varias oportunidades en toda la provincia de Buenos Aires.
A fines de 2006 se aplicó un revalúo inmobiliario aumentando hasta 4 veces la valuación fiscal de toda la provincia de Buenos Aires y en el mes de marzo de 2007 la legislatura de la Pcia. de Bs. As aprobó una ley donde se creó una sobre-alícuota en el impuesto inmobiliario y patentes, que alcanzó a contribuyentes con patrimonios superiores a los $500 mil.
Por ultimo Sr. Montenegro: esas personas que usted nombra en la nota no viven del campo ni laburan en el campo y no por nada el Sr. Miguens es ignorado por la gran mayoría de los chacareros argentinos.
Que Miguens haga las aclaraciones del caso, nosotros, los chacareros del interior pagamos nuestros impuestos y pagamos mas impuestos que la señora de Capital Federal, quédese tranquilo.
También sería muy bueno que el señor Montenegro revea el contenido de la nota que escribió y pida disculpas a los chacareros y sus familias ya que su nota es muy poco seria y ofensiva con quienes producimos e invertimos en este país.
Lo que también es innegable es que luego de haber presentado a Crítica con bombos y platillos como un diario opositor, investigación periodística rigurosa y comprometida con la realidad. Solo hemos observado que luego de 10 días de haber salido a la venta lo único que se nota es que ni es “Critico”, ni es opositor y mucho menos hace un periodismo comprometido y de investigación.
Por lo que podríamos decir que se quedó a mitad de camino entre la expectativa inicial y la desilusión.
Uno de los slogans que aparecen en el sitio web, http://www.criticadigital.com/ es “Tenemos mucha información que nadie publica”. Lo cierto es que si bien un diario no puede soslayar los temas del día, que terminan siendo comunes en todos los matutinos, quizás se puede percibir un déficit de información original.
Quizás se había generado la expectativa que llegaran más “bombas”, o noticias explosivas. Más allá de esa “escasez” de munición gruesa, alguna pegó en el blanco, como la nota sobre el proyecto del ministerio de Julio De Vido de financiar obras de la polémica Aysa con fondos del Anses, aunque la nota fue desperdiciada al perderla en las páginas interiores. Lo cierto es que a medida que pasan los días y los anunciantes no se suman aparece el sesgo complaciente y conciliador con el poder de turno.
¿Página 12 y Crítica son lo mismo?
Aparte de tener el mismo padre, existen elementos que emparentan a Crítica con el antiguo Página/12. Existen varios ex Página trabajando en el staff del nuevo diario, entre ellos Susana Viau y Miguel Bonasso. Esto se traduce en la reproducción de algunas temáticas, como el seguimiento a las causas de derechos humanos. Igualmente, la vuelta de Bonasso a su rol de periodista es al menos polémica, ya que actualmente es diputado nacional, y es aliado del kirchnerismo. ¿Se puede ser juez y parte al mismo tiempo? ¿Qué hace Bonasso desde las páginas de Crítica política o periodismo?
En cuanto a la línea editorial. ¿Qué es Crítica? ¿Un diario oficialista u opositor? Hasta ahora, en estos pocos números han intentado mantener un delicado equilibrio. Han tocado al gobierno en algunas notas interiores que marcan distancia, pero salvo pocas ocasiones han llevado a la tapa temas que pudieran incomodar a los Kirchner.
Una de los enojos mas escuchados en el paro agropecuario es el de ocupar ningún espacio importante de los diarios nacionales y esto contempla también a Critica ya que de Pagina, de Clarín y de La Nación, salvo estos últimos en el suplemento rural del sábado, poco se puede esperar.
Si era poco lo que uno podía esperar de Critica, ahora se ve reducido a la nada cuando leímos el día de hoy (18 de marzo), una nota firmada por el ignoto periodista Maximiliano Montenegro titulada “ Campo travieso” y en la cual decía:
“María del Carmen vive en un departamento de 58 metros cuadrados, de 40 años de antigüedad, sobre la calle Moldes. En la última boleta bimestral de ABL pagó 138 pesos: 150% más de lo que abonaba antes de que Macri aplicara el revalúo inmobiliario en la Ciudad. Luciano Miguens, titular de la Sociedad Rural, posee 2.219 hectáreas de campo en Salto, en la franja más rica de la provincia, con una valuación de mercado superior a los 40 millones de pesos. Paga apenas 78 pesos anuales (sí, al año) por hectárea en concepto del impuesto inmobiliario rural. Carlos Blaquier, dueño del ingenio más grande del país, y Luis Otero Monsegur, ex dueño del Banco Francés, tributan un poquito menos: alrededor de 50 pesos anuales por hectárea. Manuel Anchorena, con campos en Chascomús, abona todavía menos: sólo 8 pesos al año. La valuación fiscal de esas tierras jamás se actualizó, mientras la valuación de mercado de los campos alcanzó niveles récord en dólares. En 2005, el gobierno de la provincia de Buenos Aires gastó millones en un relevamiento catastral para readecuar los valores fiscales, sobre los cuales Rentas cobra el impuesto inmobiliario. Pero el lobby rural se hizo sentir en la legislatura bonaerense. Y el revalúo en la provincia sólo se instrumentó en los centros urbanos, donde el aumento del impuesto inmobiliario fue incluso mayor al ABL porteño”.
No vale la pena extenderse más en la nota si la quiere leer entera aquí esta:
http://criticadigital.com/index.php?secc=nota&nid=861&pagina=5&order_by=Comentario&sentido=DESC
Lo que si quiero decir es que esta nota es absolutamente tendenciosa y falsa.
Señor Montenegro: a ver....primero que nada no mezcle sandia con uvas, que relación estableció usted (al igual que este señor Montoya) para encontrar una comparación entre lo que paga de ABL una señora por el metro cuadrado de su departamento en la ciudad de Buenos Aires y un productor por la hectárea de su campo????
Realmente me sorprendió de la cantidad de barbaridades que son capaces de hacer con tal de justificarse!!
También es un error periodístico, la valuación fiscal para el impuesto inmobiliario fue aumentada en varias oportunidades en toda la provincia de Buenos Aires.
A fines de 2006 se aplicó un revalúo inmobiliario aumentando hasta 4 veces la valuación fiscal de toda la provincia de Buenos Aires y en el mes de marzo de 2007 la legislatura de la Pcia. de Bs. As aprobó una ley donde se creó una sobre-alícuota en el impuesto inmobiliario y patentes, que alcanzó a contribuyentes con patrimonios superiores a los $500 mil.
Por ultimo Sr. Montenegro: esas personas que usted nombra en la nota no viven del campo ni laburan en el campo y no por nada el Sr. Miguens es ignorado por la gran mayoría de los chacareros argentinos.
Que Miguens haga las aclaraciones del caso, nosotros, los chacareros del interior pagamos nuestros impuestos y pagamos mas impuestos que la señora de Capital Federal, quédese tranquilo.
También sería muy bueno que el señor Montenegro revea el contenido de la nota que escribió y pida disculpas a los chacareros y sus familias ya que su nota es muy poco seria y ofensiva con quienes producimos e invertimos en este país.
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